La Comisión Nacional de Telecomunicaciones de Venezuela (Conatel) los citó a todos: prestadores de servicio de televisión por suscripción y también de Internet. Y les jaló las orejas por los elevados precios. Pero a Intercable y a NetUno decidió abrirles procedimientos administrativos, según el organismo, debido a lluvia de quejas de los usuarios en las redes sociales.
Freddy Ñañez, ministro de comunicación e información, fue quien llevó la voz cantante en la reunión del martes 16 de marzo. Aunque aclaró que tenía dos instrucciones precisas de la Asamblea Nacional.
La primera: revisar los aumentos de las tarifas, que hace ya tiempo fueron fijadas en dólares y los usuarios perciben que suben y suben pero no bajan como la divisa. Y también la calidad de los servicios.
Y la segunda: Investigar por qué las señales del Canal del Estado (VTV), el de la Asamblea Nacional (ANTV) y Vive TV presentan tantos problemas no solo en Caracas sino en todo el país.
Ñañez, que de Presidente de Venezolana de Televisión pasó a ser la cabeza del Ministerio de Información, habló de especulación, de que el gobierno tiene proteger a los usuarios, y señaló directamente a dos teleoperadores: Inter y NetUno, y les abrió procedimientos para investigar si han cometido irregularidades con el cobro del servicio.
Al primero, coinciden los expertos, el Gobierno lo ha favorecido en los últimos meses para tratar de borrar dos malos tragos: La ida de Directv. Y las promesa incumplida de Simple TV.
Pero hay quienes apuestan duro que apenas el sustituto de Directv comience a funcionar bien, dejará de ser tan amable con Inter. Y el del lunes, dicen, fue solo un primer paso.
Para muestra, un botón: Ñañez se quejó por ejemplo de los US$ 6 que cobra Inter por su plan satelital, pero no chistó aún por los US $ 25 de Simple TV. Y eso tiene otra lectura: el verdadero problema no es la televisión paga sino Internet.
Hay que recordar aquí que los Proveedores de Servicio de Internet (ISP) y los WISP (versión wireless de los ISP) necesitan habilitación de Conatel. Y la verdad es que muchos no la tienen. Porque no la han tramitado. O porque no se las han otorgado, como sucede con las concesiones de radio, para poder ejercer control sobre los contenidos.
De modo que las tarifas, insinúan los que saben, es tan solo un comodín del gobierno para ganar puntos y, sí, también, para ejercer control. Vaya que lo saben las operadoras de telefonía celular. Si hay más ruido que nueces en las redes, los precios se echan atrás. Y no es cuestión de Shakespeare, sino de ganar simpatías.
PUBLICADO: 17 de marzo de 2021