Peter Bottome era hijo del primer matrimonio de Katherine Deery, casada luego con William H. Phelps, fundador de 1 Broadcasting Caracas (1BC) en diciembre de 1930, que es hoy Radio Caracas Radio. Phelps creó también Radio Caracas Televisión en 1953. Como se sabe el chavismo le quitó la concesión y fue eliminada del aire el 27 de mayo de 2007.
Peter Bottome comenzó su carrera empresarial al ser nombrado director de Radio Caracas Radio en 1959, cuando tenía 22 años, y fue pilar de su desarrollo. Luego alcanzó la presidencia de la Junta Directiva de Corporación Radiofónica Venezolana (CORAVEN) incursionando en negocios comunicacionales vinculantes: además de crear la FM 92.9 operó en la industria disquera (Sonográfica), del libro (Mercalibros) y tuvo la mayoría accionaria de El Diario de Caracas, desde 1981 hasta su cierre en 1995.
A lo largo de su fructífera vida, Peter Bottome, que tenía el hobby de volar y era excelente piloto, desarrolló con espíritu visionario la línea Aerotuy (hace poco vendida a los mismos dueños de Aserca), la escuela de pilotos Aeropotoco en el Aeropuerto Caracas y también la empresa de mantenimiento de aeronaves Airtech. En 1990 fundó en Puerto La Cruz el Centro Marino de Oriente, pionero en la reparación y mantenimiento de embarcaciones deportivas.
Cuando en 1980 el Grupo 1BC adquirió la mayoría de El Diario de Caracas, comenzó a asistir regularmente al periódico. En la redacción, alguien escribió una broma en la cartelera: “Para muestra, basta un Bottome”. Todos creyeron que se enojaría, pero quedaron desarmados: se lo tomó en solfa. Fue entonces que lo conocí. Y supuse con los años que ese hombre de bajo perfil y sonrisa eterna, ese optimista que aparentaba ser muy reservado pero, a las primeras de cambio, decía lo que pensaba sin tapujos, iba a terminar su vida sin traicionar sus creencias y siendo muy consecuente en sus compromisos personales y corporativos. Un ejemplo fue su actitud –y la de los demás directivos y accionistas—ante el incalificable despojo de RCTV.
Bottome fue un hombre sencillo, cumplido, con energía positiva y ese fino humor, nada fácil de descubrir, que lo distinguió siempre. La parábola de su vida está en una metáfora con dos fechas: nació un 28 de diciembre, día de los Santos Inocentes; murió un 14 de febrero, día de los enamorados. Queda todo dicho. Descansa en Paz Peter. Y sigue sonriendo.
Raúl Lotitto
PUBLICADO: 15 de febrero de 2016