Nutella, al igual que otras marcas, se ha unido a la campaña de personalización de emvases con los nombres de las personas. Sin embargo, no todos pueden hacerlo, algunos son discriminados. Fue el caso de Isis, una niña australiana de cinco años, a quien se le negó personalizar un tarro con su nombre porque está prohibido.
La compañía llamó a su madre para explicarle que el nombre de su hija estaba prohibido por ser igual al del grupo terrorista del Estado Islámico y que existe una lista de palabras y nombres que no son permitidos porque pueden alterar a las personas.
PUBLICADO: 01 de diciembre de 2015