Aunque el concepto de aerolíneas de bajo costo nació en Estado Unidos hace medio siglo, este se ha popularizado en las últimas dos décadas en Europa, Asia y Australia. Y ahora le toca a Latinoamérica, con Perú y Colombia a la cabeza. A Venezuela, dicen que viene… Ver para creer
La aerolínea Wingo anuncia su llegada a Colombia para el próximo 1 de diciembre, ofreciendo despegar a 16 ciudades en 10 países de América Latina y el Caribe para llevar a todos los que quieren viajar de “manera fresca y sin pagar millonadas” a destinos como Cancún, La Habana, Aruba, Punta Cana, Ciudad de México, San Andrés, Ciudad de Panamá, Quito, Cartagena y Caracas, entre otras.
La línea proyecta como su público objetivo a jóvenes, adultos, familias, parejas, grupos de amigos, emprendedores y empleados y a todos los que quieren viajar a bajos precios sin sacrificar calidad. Su flota inicial 4 aviones Boeing 737-700 con capacidad para 142 pasajeros en una cabina. En Colombia Wingo es filial de Copa Airlines y viene a competir directamente con Viva Colombia, quien ha cautivado buena parte del mercado local desde que inició operaciones en mayo de 2012. Con sus aviones llegan a 11 destinos del país, con pasajes que van desde 50.000 pesos por trayecto, subiendo dependiendo de los beneficios adicionales que se requiera. También en el formato de bajo costo se encuentra EasyFly, que tras iniciar operaciones en 2007 ya llega a 16 destinos del norte de Colombia, con una flota de 13 Jet Stream 41. Los precios sin embargo, son más altos pues oscilan entre 100.000 y 200.000 pesos por trayecto.
El mercado Peruano resulta atractivo según explica Carlos Gutiérrez, gerente general de la Asociación de Empresas de Transporte Aéreo Internacional (Aetai), por la poca penetración de los vuelos que hay y porque el precio del petróleo está bajo, lo que abarata los costos de operación de toda aerolínea y con mayor razón si se trata de hacer conexiones de larga distancia. De ahí que en los últimos 5 años años tres ‘low cost’, las estadounidenses Spirit y Jet Blue, y Viva Colombia, llegaran con su oferta de vuelos internacionales. Y durante los últimos tres meses confirmaron su llegada a Lima: la mexicana Interjet y la española Plus Ultra, también con vuelos internacionales. La brasileña Gol, también andaría en la fila.
En Venezuela, por ahora es un absurdo pensar en la llegada de aerolíneas de bajo costo por el perverso control de cambio, que terminó perjudicando exclusivamente al pasajero, aunque a las aerolíneas les deban 3800 millones de dólares (Ver revista PRODUCTO 376, págs. 56- 58). Pero esas aerolíneas tarde o temprano cobrarán lo suyo. Los pasajeros venezolanos seguirán haciendo malabares para conseguir un boleto, andar saltando de página web en página web, tarjeta de crédito extranjera en ristre, porque localmente no se permite vender en dólares y casi ninguna empresa vende en bolívares. Eso sí cuando llegan, y si es que llegan las de bajo costo, aquí van a hacer su agosto porque el pasajero venezolano debe ser uno de los más fogueados en soportar de todo, con tal de salir volando.
PUBLICADO: 21 de octubre de 2016