Una simple frase, Just do it (Solo hazlo), ha marcado la historia de Nike por tres décadas y ahora para celebrar este eslogan, la marca deportiva escogió al polémico futbolista Colin Kaepernick para hacer un alegato impactante contra la discriminación. Incluso, Donald Trump ya acusó el golpe.
“Nike” es la diosa griega de la victoria. De allí toma su nombre la emblemática marca de indumentaria deportiva, considerada –con arreglo a las ideas del CEO de Saatchi & Saatchi, Kevin Roberts- una genuina lovemark, una marca con la cual sus compradores han desarrollado un sentimiento de arraigo muy estrecho, e incluso afectivo y sensorial.
Otros casos de lovemarks son, por ejemplo, Hilton, Apple, Los Beatles, Mercedes Benz y hasta Madre Teresa.
Lo cierto es que Nike suena con fuerza por estos días en el panorama noticioso. ¿Por qué? Muy sencillo: se celebran los 30 años del famoso slogan Just Do It. Lo anterior traduce al castellano “Sólo hazlo”, y en su momento fueron muchas las críticas generadas por la frase.
Si uno camina por cualquier suburbio parisino o latinoamericano, por solo poner dos casos, verá la legendaria “palmeta”, logotipo de Nike, en las camisetas, shorts y zapatillas deportivas de muchos parroquianos comunes. La maquila no le ha hecho ascos a Nike, de modo que las prendas imitación, producidas masivamente en China –verbigracia- abundan por todo el planeta.
En Venezuela, de modo particular, fueron sonados en los años ´90 del siglo pasado los asesinatos de quemarropa, en las barriadas de Caracas, para robar sencillamente un par de zapatos de goma marca Nike. No faltó quien asociaría el slogan “Just do it” con una incitación indirecta a la violencia callejera, al homicidio y al robo.
Marketing y política
El diario El País de España pinta las cosas de modo muy elocuente: “Nike entra de lleno en política. Y lo hace poniendo todo el poder de su marca detrás de la que quizás sea la figura más polémica del momento en el mundo del deporte en Estados Unidos, en un país partido políticamente en dos. La firma de indumentaria deportiva toma partido y va a utilizar a Colin Kaepernick, el antiguo quarterback de los 49ers de San Francisco, convertido en símbolo de las protestas antirraciales, como uno de los atletas que protagonizará la campaña con la que celebra el 30 aniversario del icónico eslogan Just do it”, se lee en un despacho del rotativo madrileño.
La nota agrega que Kaepernick dejó de competir en la Liga de Futbol Americano (NFL) tras concluir la temporada 2016, “cuando empezó a hincar la rodilla en el césped para escuchar el himno nacional. Era su manera de mostrar ante la bandera de las barras y estrellas el rechazo a la brutalidad policial contra la comunidad afroamericana y otras injusticias sociales. Las protestas continúan hasta el punto de que la cadena que solo ofrece deporte ESPN decidió no emitir esta temporada el himno para evitar alimentar la controversia”.
El pasado 3 de septiembre, el atleta reventó la noticia vía Twitter: “Believe in something, even if it means sacrificing everything #justdoit”. Ese fue su tweet. Como se puede ver, esto busca dar un giro acaso espiritual, o al menos más humano, a este famosísimo slogan, que ya llega a los 30 años de existencia.
El lema del tweet traduce al castellano: “Cree en algo, incluso si esto significa sacrificarlo todo”. El video se llama “Dream Crazy”, y en el mismo Kaepernick hace las veces de narrador, al tiempo que rotan imágenes de deportistas con historias inspiradoras, como el emblema de la NBA LeBron James, la estrella del tenis Serena Williams y el corredor keniata Eliud Kipchoge.
Un negro en la Casa Blanca
Pero esto ha sido leído, de modo más vertical, como un ataque directo al presidente Donald Trump, un republicano que ha sido señalado de racista por sus detractores, y que se ha hecho célebre por haber recrudecido las políticas en contra de la inmigración latina.
“Nike está siendo absolutamente azotada por la indignación y los boicots. Me pregunto si tenían idea de que sería así. En lo que respecta a la NFL, me resulta duro de ver, y así será ¡hasta que respeten la bandera!”, lanzó Trump en su cuenta de la red social de micro blogging del pajarito azul.
En la campaña que lo llevó hasta la Casa Blanca, incluso no faltó entre sus enemigos quien lo vinculara con el mismísimo Ku Klux Klan.
El Ku Klux Klan es un conjunto de organizaciones de extrema derecha que nacen en el gigante del norte durante el siglo XIX, para promover la supremacía de la raza blanca, y con ello el racismo, la xenofobia y el antisemitismo. Otras anomias sociales atribuibles a esta especie de logia son la homofobia, el anticatolicismo, y el anticapitalismo.
Es verdad que los Estados Unidos son la nación más poderosa del orbe. Pero no es solo su cine independiente el que ha señalado los múltiples vicios de la sociedad americana. El racismo es uno de ellos. Los estadounidenses de origen anglosajón desde hace muchos años han manifestado muestras de racismo hacia africanos, asiáticos, italianos, polacos, latinoamericanos y otras clases de inmigrantes.
No hay que olvidar también que los Estados Unidos son nada menos que la patria de Martin Luther King, un pastor bautista que pasó a la historia por sus radicales luchas a favor de los derechos civiles de los afrodescendientes, pero que asimismo ostentó una fuerte militancia en contra de la Guerra de Vietnam y la pobreza, en general.
“Aunque con esta maniobra Nike trata de llamar la atención hacia un debate necesario en Estados Unidos, no deja de ser arriesgada porque entra de lleno en una cuestión muy controvertida".
Reflejo de esa tensión, las acciones de la compañía cayeron más de un 3% en Wall Street cuando salió el video.
"La polémica provocó, por ejemplo, que el fundador de la cadena de pizzerías Papa John´s tuviera que dejar hace un año el cargo de consejero delegado porque su relación con la NFL afectó a las ventas y dejó de patrocinar también la Superbowl”, remata la citada nota de El País.
PUBLICADO: 06 de septiembre de 2018