La leyenda del futbol argentino, Diego Armando Maradona, murió hoy cerca del mediodía de un paro cardio respiratorio tras sufrir una descompensación de la que los médicos no pudieron reanimarlo. Había cumplido 60 años el pasado 30 de octubre.
El futbol mundial está de luto. Se fue un grande del balompié: Diego Armando Maradona. "El Pelusa" -como era llamado en su natal Villa Fiorito por su gran cantidad de vellos corporales- falleció por un paro cardio respiratorio mientras guardaba reposo en su residencia bonaerense de El Tigre.
Maradona fue internado a principios de noviembre en una clínica de Buenos Aires por presentar un cuadro de anemia, deshidratación y bajo ánimo. Después de hacerle varios estudios, se determinó que tenía un hematoma subdural, una especie de coagulo en la cabeza, por lo que se recomendó la intervención quirúrgica. En los últimos días del campeón mundial, su entorno familiar lo observó muy ansioso, confuso y nervioso, por lo que pensaron en trasladarlo a Cuba para su rehabilitación, porque asociaron los síntomas que presentaba a un cuadro de abstinencia. Sin embargo, después de tres semanas de hospitalización y una satisfactoria evolución, le dieron el alta para continuar la recuperación clínica en su residencia.
Pero cerca de la 1 de la tarde del miércoles 25 de noviembre, se reportó que “El Diego”, había sufrido un paro cardiaco y poco después, tras intentos fallidos por parte de los médicos para reanimarlo, fue oficializada su muerte. Sebastián Sanchi, jefe de prensa de Maradona, confirmó el hecho a los medios con un sentido: “Murió Diego”. El 30 de octubre pasado había cumplido 60 años.
El Diez
Diego Armando Maradona nació en 1960, en Villa Fiorito, provincia de Buenos Aires. Su primer contacto con la pelota fue en Argentina Juniors a los 15 años. Hincha del Boca Juniors, logró cumplir su sueño de portar los colores azul y amarillo de la camisa del club, y del Newell’s Old Boys, equipo de la ciudad de Rosario, Provincia de Santa Fe.
Su consagración comenzaría cuando lo fichó el FC Barcelona, como campeón mundial con Argentina en México 86. Luego, en 1987, lo firma la Societá Sportiva Calcio Nápoles, un modesto equipo italiano que hasta el momento solo tenía dos títulos de la copa. Este se convirtió en el fichaje más caro de la historia: 7.5 millones de euros. Tiene el famoso “doblete”, es decir, ganar la liga y copa en el mismo año.
Esa victoria marca el inicio de una época de sinsabores y altibajos para el astro argentino: títulos, alegría y escándalos por su adicción a las drogas, alcohol e infidelidades. Un dopaje que le realizaron en 1991, tras el partido contra el Bari, le valió la suspensión de las canchas por 15 meses. Tampoco ayudaron los rumores sobre su supuesta vinculación con carteles de la droga y su evidente cercanía a políticos de izquierda como Fidel Castro y, más adelante, Hugo Chávez y Nicolás Maduro.
Pese a sus idas y venidas, su incondicional afición le perdonó todo gracias a las victorias conseguidas para la escuadra napolitana: dos Scudettos, incluido el primero en la historia del Nápoles; una Coppa, una Súper Copa y la Copa de la UEFA. En resumen: Maradona jugó 259 encuentros y marcó 115 goles durante su estadía en el Nápoles. Sólo basta pasear por las calles de esta ciudad del sur de Italia, para confirmar con murales, nombres de calles y museos en su honor, el gran respeto y adoración que se le guarda al famoso 10 argentino.
Posteriormente, el paso del Pelusa por equipos de futbol fue breve. Una corta temporada en el Sevilla y una corta estadía en el Newell’s, precedieron su etapa como entrenador, debutando con el Mandiyú de Corriente en 1994 y el Racing Club en 1995. Luego de un largo silencio de 14 años aproximadamente, cumplió otro de sus sueños: dirigir a la selección Argentina. En 2010 Maradona fue con su equipo al Mundial de Sudáfrica y dirigió 24 partidos, ganando 18 de ellos.
La última etapa de su vida la pasó como técnico del equipo Dorados de Sinaloa, en México, por un año, para terminar su carrera como técnico de gimnasia y esgrima de La Plata.
Idolatrado por los fanáticos del fútbol en todo el mundo, pero odiado también por su desfachatada manera de vivir y su postura política, que lo llevó a codearse con los líderes de la decadente izquierda latinoamericana, Diego Armando Maradona será recordado por todos como el gran ídolo que le dio las mayores alegrías al mundo deportivo y, especialmente, a Argentina, que hoy está de luto y llora inconsolable por la pérdida de uno de sus dioses.
PUBLICADO: 25 de noviembre de 2020