La crisis eléctrica está lejos de ser resuelta y la estabilización del sistema de generación y distribución es una tarea imposible en las actuales condiciones de deterioro y desinversión, según los expertos convocados por la Asamblea Nacional para buscar opciones concretas para superar la crisis, entre las cuales destacan regresar al esquema descentralizado de gestionar el servicio e incorporar, de nuevo, al sector privado desterrado por la revolución chavista para implantar un sistema de control que no ha funcionado.
El diputado Enrique Márquez destacó en la presentación de las alternativas del Plan País para el sector eléctrico, una estrategia de gobierno de transición que promueve el parlamento encabezado por su presidente y mandatario encargado de la República, Juan Guaidó, para enfrentar la debacle que padece el Sistema Eléctrico Nacional, no solo en materia de generación, sino que alcanza a las áreas de distribución, comercialización y calidad de servicio. "Si el sistema no es atendido como un todo, no se podrá superar la crisis".
"La crisis eléctrica es también una crisis energética", dice el ingeniero Winston Cabas, presidente de la Asociación de Ingeniería Eléctrica, Mecánica y Profesional del Colegio de Ingeniero de Venezuela (CIV), porque no hay disponibilidad de combustibles para levantar la generación de las centrales termoeléctricas. "Por eso se producen apagones nacionales, porque se depende excesivamente de Guri".
El sistema eléctrico tiene una capacidad estimada de generar 34.000 megavatios y solo están disponibles 12.000. Las plantas termoeléctricas distribuidas por el país cuentan con un potencial consolidado de alrededor de 13.000 megavatios, y solo generan 2.000. Sin este sistema de respaldo, un evento crítico en la infraestructura de generación hidroeléctrica genera una situación catastrófica a escala nacional.
"No hubo ningún sabotaje. Lo que hay es una grave carencia de mantenimiento. Nosotros hemos propuesto hacer una auditoría técnica con ingenieros venezolanos calificados, propuestos por los centros académicoa la Asociación de Ingeniería Eléctrica, el Colegio de Ingenieros, y el gobierno de Maduro no da respuestas, y lo que dicen es que van a traer a supuestos expertos de Rusia, China y Cuba. La ingeniería venezolana fue capaz de diseñar un sistema que, en tiempo récord, logró electrificar a más de 90% del país, con infraestructura de primer nivel. No necesitamos esa asesoría técnica para saber que no es posible sabotear los sistemas de control que tiene Guri, los cuales fueron muy bien diseñados y no son fácilmente accesibles", dice Cabas.
El ingeniero sostiene que el sistema está estructuralmente debilitado y la situación interna de Corpoelec no es menos grave. Según los datos de Cabas, de los 53.000 trabajadores de la empresa eléctrica estatal, se han ido 25.000 para buscar mejores oportunidades, entre ellos 15.000 ingenieros y técnicos de alta calificación. "Hay que reconstruir todo el sector eléctrico, pero a partir del personal que queda haciendo enormes sacrificios y trabajando en condiciones precarias", dice el experto.
Victorias tempranas
Los asesores técnicos del programa para el sector eléctrico de la transición que promueve Juan Guaidó están claros en que la situación del Sistema Eléctrico Nacional demanda acciones urgentes para mantener un mínimo de suministro confiable, pero recuperar la totalidad de la infraestructura e inversiones que, de acuerdo con un cálculo "grueso", deben ser de alrededor de USD 120.000 millones. Nada fácil.
Sin embargo, la estrategia es incorporar de manera urgente, durante un plazo de 90 días, unos 5.226 megavatios generados en plantas hidroeléctricas, con una inversión adicional que no superaría los USD 2.000 millones, lo que significaría elevar en aproximadamente 50% la oferta energética actual.
La idea es trabajar en plantas que se consideran críticas, como Planta Centro, Tacoa, La Vueltosa y el sistema del occidente del país, donde la crisis es especialmente aguda, sobre todo en el estado Zulia, un caso que plantea una dramática paradoja, ya que la región puede recibir 300 megavatios de manera directa. Además, los expertos proponen utilizar Orimulsión para levantar la generación de energía de fuente termoeléctrica.
La Orimulsión es un combustible patentado por Pdvsa a partir de crudo extrapesado, agua y sulfactantes, en los años '80 del siglo pasado y que se convirtió en una marca registrada de la petrolera estatal. Su producción fue detenida en 2003, a pesar de sus ventajas y la existencia de una creciente demanda internacional -sobre todo de China- precisamente para alimentar la generación de electricidad. En ese momento se dijo que no era la manera más rentable de utilizar los crudos pesados y extrapesados de la Faja del Orinoco.
La otra propuesta del Plan País para el sector eléctrico es terminar de revisar la situación de aquellas obras donde se presume la existencia de casos de corrupción, como la construcción de la represa de Tocoma en el Orinoco, o una red de parques eólicos que se presupuestaron y fueron objeto de inversiones, pero jamás se construyeron.
Estos cálculos son aproximados, sostiene el diputado Enrique Márquez, "porque la verdad es que no sabemos con qué nos vamos a encontrar. Lo más seguro es que la situación del sistema sea peor de lo que pensamos".
PUBLICADO: 29 de marzo de 2019