Budweiser, Visa, McDonald's y Coca Cola lo condenaron: exigieron a la FIFA la salida de Joseph Blatter como presidente del organismo que rige el fútbol mundial, el deporte más popular en el planeta.
La reacción, sin embargo, no se hizo esperar. Y se desató la guerra: Adidas y Kia, también fuertes socios comerciales de la federación, defienden al suizo de 79 años. En el caso de la marca alemana, hay sobradas razones para ello: Blatter se incorporó a la FIFA a mediados de la década de los setenta; fue una recomendación de Horst Dassler, para entonces presidente de Adidas. Su principal misión sería administrar programas de desarrollo financiados por Coca Cola.
Ahora, casi cuatro décadas después, los dos gigantes del mercado se enzarzan en una lucha de poder por hacer prevalecer sus posturas: Coca Cola exigió la salida de Blatter después de que fuera involucrado por autoridades de Suiza en presuntos hechos de corrupción. La marca de artículos deportivos, en cambio, le expresa apoyo a quien afirma que su salida del organigrama no es conveniente mientras intente imponer reformas para limpiar la reputación de una organización con más socios que las Naciones Unidas.
"Cada día que pasa, la imagen y la reputación de la FIFA continúa empañándose", expresó Coca-Cola en el comunicado en el que pidió la medida contra el dirigente suizo. "La FIFA necesita una reforma integral y urgente, que sólo se puede lograr a través de un enfoque verdaderamente independiente", agregó.
En contraste, Adidas, que provee desde 1970 los balones para los mundiales y tiene contrato para ello hasta 2030, hizo público un mensaje en el que afirma: "La FIFA debe completar cambios fundamentales por el bien del fútbol. El proceso de reforma debe continuar de manera expedita y transparente".
La marca de automóviles Kia, que comparte la posición del gigante deportivo alemán, es patrocinador de FIFA junto con su filial corporativa Hyundai desde 1999. "No hay comentarios respecto a Blatter o nuestro estatus actual como patrocinadores de FIFA", señaló el consorcio en un comunicado.
Coca-Cola y McDonald's, que comparten la posición adversa, son dos de los mayores patrocinantes de la FIFA y los mundiales. Ambas empresas de alimentos apuntan a una alianza común para lograr cambios en la dirección del fútbol, que mueve a millones de consumidores en todo el planeta y, por tanto, millones de dólares.
PUBLICADO: 06 de octubre de 2015