Desde la gestión de Hugo Chávez eran recurrentes los ciclos de acercamiento con el sector productivo nacional que concluían en un nuevo giro de la rueda donde el discurso antiempresarial del Gobierno era el protagonista junto a nuevas medidas de control y a mayores cargas sobre las empresas, hasta llegar a otro proceso de diálogo para encontrar las causas de los problemas que frenan la producción nacional. Y vuelta a empezar.
Con Nicolás Maduro no ha sido diferente. “Yo sí creo que hay que renovar la convocatoria a todas las fuerzas productivas reales del país, a todos aquellos que quieran verdaderamente comprometerse hoy en dar pasos decisivos de estabilización productiva de la economía”, dijo este fin de semana el Jefe de Estado.
En mayo de 2013 Maduro comenzó un ciclo de reuniones con representantes de todos los sectores que fue interpretado por todos como una muestra de apertura. Este hecho renovó el optimismo en los gremios empresariales, porque todo apuntaba a la consolidación de acuerdos que pusieran fin a las trabas productivas del país. Pero no fue así.
De la revisión pormenorizada de los problemas que enfrentaban las empresas sólo quedó el diagnóstico, porque las soluciones no se aplicaron. La restricción de divisas para la importación de insumos y materias primas se agudizó, así como el retraso en la liquidación de dólares ya autorizados para el pago de proveedores externos.
Al cierre de febrero de 2014 se renovaron las intenciones del Gobierno de dialogar con el empresariado. Las quejas eran las más mismas, el diagnóstico se actualizó, y nada más. De hecho, en ese ciclo de encuentros fue clave el discurso de Lorenzo Mendoza, presidente de Empresas Polar, quien resumió en 12 puntos la agenda de actividades que ayudaría a revertir la situación económica que ya entonces lucía crítica.
En estas reuniones multidisciplinarias, que se celebraban con distintos ministros del Ejecutivo, llegaron a darse encuentros hasta con 600 representantes de empresas en una sola sesión. En cada oportunidad los asistentes llenaban planillas con todos los datos de su compañía y hacían reportes directos de su situación particular.
Más de un año después, Maduro repite la convocatoria y acota que los empresarios deben estar comprometidos para solventar la situación económica. Aunque ya no existen cifras oficiales al respecto, consultoras privadas y analistas estiman que este año la inflación estará en el orden de 160% y que la escasez se ubica sobre 60%.
“Los convoco desde ya a una jornada especial de diálogo productivo económico aquí en Miraflores y en todo el país. Desde ya convoco a todos los sectores sin ningún tipo de exclusión, a sectores económicos productivos, desde los más pequeños".
Por su parte la ministra de comercio, Isabel Delgado, puntualizó que en esta ocasión “no sólo nos vamos a reunir con el sector empresarial, van los médicos, los trabajadores, los comerciantes, los maestros, las cooperativas, los sistemas de producción directos e indirectos”.
Declaró a Globovisión que espera que “poco a poco” se den las condiciones de la reunión con todos los sectores productivos del país convocados por el presidente Nicolás Maduro.
PUBLICADO: 28 de junio de 2015