Cada año los grandes estudios cinematográficos de Hollywood gastan millones de dólares haciendo campaña para llegar a los 6.261 miembros de la Academia que votan en los premios Oscar. Se trata de una empresa que requiere tiempo, esfuerzo creativo, pero sobre todo dinero, mucho dinero.
Según estimaciones de medios especializados de Los Ángeles, Hollywood gasta entre 100 millones de dólares y 500 millones de dólares en un año de campaña dirigida a los votantes de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas.
Premios cotizados y costos
Las críticas constantes a la Academia radican en la selección de las películas nominadas en las categorías más importantes. Pero no siempre están las producciones más populares o las más profundas desde el punto de vista artístico o cinematográfico, en la Academia buscan un equilibrio entre una pieza cinematográfica de valía y un producto masivo con un mensaje o historia impactante, de relevancia.
Según especialistas y blogueros que siguen la pista de las inversiones de campaña durante la temporada de premios previa a los Oscar, una campaña exitosa para mejor película ronda los 10 millones de dólares. La mayor parte de esta cifra va a publicistas, medios de comunicación y estrellas cinematográficas.
Los costos no terminan solo en la publicidad tradicional. Según reseñó BBCMundo, dentro del sistema de piezas que se mueven para promocionar las películas, se encuentran los consultores que se encargan de que las películas estén en las mentes de los miembros de la Academia. A estos consultores se les paga entre 10.000 y 20.000 dólares por película, cifra que puede duplicar o triplicar los honorarios si la película tiene alguna nominación y si resulta ganadora.
Otras estimaciones indican que ganar el Oscar a mejor película se traduce en una ganancia de aproximadamente 3 millones de dólares a la taquilla del filme, dato que contrasta con las ganancias que genera una victoria en los Globos de Oro, que se estima en 14 millones de dólares en ganancias.
En el caso de los actores, el hecho de ganar un Oscar aumenta el pago que, en el caso de los hombres, ronda 4 millones de dólares; mientras que el incremento del pago de las actrices es de apenas 500.000 dólares, según un estudio de 2014.
Después de todo no solo se trata de arte, las películas son un producto y como tal, en ocasiones, son más relevantes las condiciones propias de una mercancía que de una pieza artística para lograr el éxito. En Hollywood la política y el reconocimiento son importantes y determinantes. Ahora todo queda servido para la edición 88 de los premios Oscar.
PUBLICADO: 26 de febrero de 2016