"Me planteo mis películas como un foro abierto. Mis películas son anti propaganda, porque no trato de obligar al espectador a asumir como válido un punto de vista determinado, sino que lo invito a reflexionar con independencia. No me creo poseedor de ninguna verdad, pero postulo la necesidad de repensar el país".
Carlos Oteyza conversó con PRODUCTO desde Madrid, donde se exhibe su más reciente película, el documental El Pueblo Soy Yo: Venezuela en Populismo, un film de 87 minutos que no pretende contar la historia de cómo el chavismo llegó al poder y lo ha conservado durante dos décadas, sino llevar al cine un análisis sobre el populismo como forma de gobernar. "El populismo no es una ideología, es una forma de hacer política que puede ser practicada por gente de izquierda y de derecha", apunta.
P:-Se ha escrito y visto mucho sobre el populismo, a raíz de lo que ha pasado en Venezuela. ¿Cuáles son los rasgos que distinguen a esta película de otras obras sobre este tema?
CARLOS OTEYZA: -Creo que el hecho de que no es una narración histórica sobre lo que ha pasado en Venezuela. No contamos cronológicamente cómo llegó y se mantuvo Hugo Chávez en el poder, ni cómo lo ha hecho Maduro. Utilizamos a Venezuela como un caso de estudio sobre el populismo para mostrar lo que es y lo que representa. Por eso creo que es importante e interesante, no solo para América Latina, sino para Europa, ya que ningún país es inmune al populismo. Ahí tenemos el ejemplo de Estados Unidos.
La película describe las diferentes características del fenómeno populista: la emergencia de un líder mesiánico que se autoproclama como representante indiscutible de las mayorías; la división de la sociedad en buenos y malos, camaradas y traidores, amigos y enemigos, ricos y pobres, corruptos y puros, en la cual siempre la superioridad moral está de lado de quienes apoyan al gobierno; la destrucción de las instituciones, porque el líder rechaza los contrapesos; la proscripción de las voces políticas opositoras, no porque piensen distinto al líder, sino porque son "enemigas" del pueblo; la persecución de los medios de comunicación independientes; el reforzamiento del poder del Estado sobre las vidas y patrimonios de las personas.
CO: -El populista se apodera de la verdad, por eso los medios son objetivos claves en el proceso de establecer estas formas de gobierno. No puede haber crítica ni denuncia. Por ejemplo, la destrucción de Pdvsa se origina por el afán de control económico del Estado, porque así es el populismo; debe controlarlo todo y a todos, porque es la "encarnación del pueblo" y no solo habla en su nombre, sino que piensa en su nombre.
Alianza histórica
El productor ejecutivo de El Pueblo Soy Yo: Venezuela en Populismo es el historiador mexicano Enrique Krauze, quien conoció a su colega historiador y cineasta, Carlos Oteyza, en 2015 y prácticamente de inmediato decidieron echar a andar este proyecto fílmico.
Krauze ha escrito una obra extensa e intensa sobre el populismo que se expresa bien en su libro El Poder y El Delirio. Además, este historiador no es ajeno a la divulgación histórica en medios audiovisuales, a la traducción de la historia a un lenguaje cinematográfico, pues produjo para Televisa una serie icónica, Los Sexenios, que cuenta la historia de México desde la caída del régimen de Porfirio Díaz y se centra en la crónica de los gobiernos sexenales de la "dictadura perfecta" del PRI, mientras duró, hasta la llegada de Vicente Fox en 2000, como primer hito de alternancia republicana real.
Esta alianza de historiadores amantes del cine hace que este documental se presente como una producción mexicana.
P:-¿De dónde salieron los recursos?
CO:-La película costó poco. No hubo necesidad de grandes recursos, porque, en general, la producción de documentales depende más del compromiso de los equipos que los hacen que del dinero. Sabemos que este no es un género precisamente comercial
P:-¿Cuáles fueron los retos que implicó la traducción de un tema teórico y árido, como el populismo, al lenguaje dinámico de una película?
CO:-Lograr un ritmo ágil y que capte al espectador fue el reto primordial. Y creo que lo conseguimos. La película no tiene narrador, sino que se trata de una sucesión de imágenes y datos que se alternan con testimonios de entrevistados muy relevantes, conocedores y que tienen cosas importantes que decir. La película apela a la razón del espectador, sin dejar de emocionarlo. Es como el proceso de armar un gran rompecabezas.
P:-El estreno fue en Madrid. ¿Cuál es el recorrido que sigue con El Pueblo Soy Yo?
CO:-En este momento, no está claro. Por supuesto que queremos que la película se vea en América Latina y sobre todo, en Venezuela. Es importante, porque los venezolanos no hemos sido muy amigos de mirar y conocer nuestro pasado. Tuvimos un sistema democrático y republicano que funcionó por 40 años, y no supimos cuidarlo ni defenderlo. No valoramos adecuadamente la democracia, porque, como no teníamos una perspectiva histórica, pensábamos equivocadamente que era eterna. Esta es una lección que debemos enseñar a las nuevas generaciones. Si recuperamos la democracia, hay que cuidarla siempre. Entiendo que el gobierno está acelerando un proyecto de film biográfico de Hugo Chávez. Eso me parece muy bien. Yo espero que podamos tener esa competencia, que coincidan ambas concepciones en las salas de cine, y que los venezolanos decidan.
LAS VOCES DE EL PUEBLO SOY YO: VENEZUELA EN POPULISMO
ENRIQUE KRAUZE – México.Historiador y ensayista, RICARDO VILLASMIL – Venezuela. Economista. CARLOS RAÚL HERNÁNDEZ – Venezuela. Analista político. LUIS PEDRO ESPAÑA – Venezuela. Sociólogo. ALBERTO BARRERA TYSZKA – Venezuela. Escritor y biógrafo de Hugo Chávez. LORIS ZANATTA – Italia. HistoriadorA especialista en América Latina, FERNANDO MIRES – Chile. Politólogo y sociólogo. ALEJANDRO MORENO – Venezuela. Psicólogo social. ANA TERESA TORRES – Venezuela. Escritora. INÉS QUINTERO – Venezuela. Historiadora. ROCÍO SAN MIGUEL – Venezuela. Abogada especialista en temas militares. LUIS IZQUIEL – Venezuela. Abogado y criminólogo. MARIANELA BALBI – Venezuela. Periodista, Y CARLOS CORREA – Venezuela. Periodista.
Estas son las voces que Carlos Oteyza expone para desarrollar su análisis cinematográfico del populismo como fenómeno político. Los testimonios, como se puede apreciar, son variados y atienden a una visión amplia del tema de la película.
LA HISTORIA COMO ESPECTÁCULO
Es un lugarcomún que la historia no vende, es aburrida; sin embargo, ha sido un tema recurrente en la evolución de la industria cinematográfica. Con todo y las licencias que impone el negocio, contar eventos trascendentes del pasado -sean míticos o reales- ha dado grandes dividendos.
Con el género documental es otra cosa. Las dificultades de exhibición son enormes y como el potencial de rentabilidad es bajo, pues la producción se desestimula. No obstante, en América Latina, y Venezuela no es la excepción, este cine sin actores profesionales ni escenarios prefabricados, que intenta mirar la vida tal cual es, ha cumplido un papel inmenso como divulgador, denunciante, testigo y espejo de realidades incómodas.
Carlos Oteyza no es único en su especie, pero ha sido uno de los más exitosos. Sus obras Tiempos de Dictadura (2012), una crónica que excede la política del régimen de Marcos Pérez Jiménez, que reunió a más de 100.000 espectadores, y CAP Dos Intentos (2016), sobre los dos gobiernos de Carlos Andrés Pérez, fueron éxitos notables de público y crítica, a pesar de una distribución muy limitada.
Manuel de Pedro, Carlos Azpúrua, Jesús Enrique Guédez, Antonio Llerandi, Jacobo Penzo, figuras históricas del documental venezolano, han encontrado una importante generación de relevo con gente como Carlos Caridad, Javier Chuecos o Eliézer Arias, entre muchos otros.
La política y la crítica social han dejado de ser los grandes temas de un cine que se asociaba siempre con un compromiso militante, para pasar a ser una vista más panóramica sobre el país, sus temas y sus personajes.
Es posible, no obstante, que los éxitos de Tiempos de Dictadura -el dcoumental más visto de la historia del cine nacional- y CAP Dos Intentos, se expliquen por el sentido de oportunidad que caracteriza al cine de Oteyza. Ahí está la vena del historiador capaz de saber cuáles son los insumos del pasado que permiten entender las tragedias del presente.
Ahora, Oteyza lo ha hecho de nuevo.
PUBLICADO: 10 de octubre de 2018